El diseño de estas gradas, da solución a los problemas de espacio y acceso que pueden surgir, maximizando él numero de plazas. Las dimensiones y forma de las gradas varian en función de las necesidades planteadas en cada momento.
El graderío consta de una serie de módulos móviles, fijado él ultimo al suelo o al paramento vertical, por medio de tacos carriles, dependiendo del lugar final de ubicación.
El sistema de apertura consiste en el deslizamiento de cada modulo sobre el siguiente, arrastrado uno cada uno al que procede, hasta que los topes impiden el movimiento, produciéndose este hecho en la máxima extensión del conjunto. A su vez posee un sistema de bloqueo que impide el cierre no deseado de la grada cuando esta en uso.